Implica alimentarse correctamente y practicar actividad física, con el fin de evitar el sobrepeso y prevenir enfermedades.
Cinco porciones de verduras y frutas al día, además de carnes blancas, legumbres y alimentos ricos en fibra
Se recomienda el consumo de al menos 2 litros de líquido sin azúcar al día
No hay alimentos buenos o alimentos malos, lo que importa es comerlos en la cantidad y horario adecuados
La ASN (American Society for Nutrition) declara que una dieta vegetariana o vegana es una opción dietética saludable que ayuda a prevenir y tratar, en forma no farmacológica, algunas enfermedades crónicas comunes, tales como hipertensión arterial, diabetes mellitus y algunos tipos de cáncer.
Sin embargo, para evitar carencias nutricionales y problemas de salud en este tipo de dietas, es necesario contar con una adecuada asesoría profesional. Es papel del/la nutricionista contar con las herramientas adecuadas para poder orientar y educar a las personas que opten por este tipo de alimentación.
Una dieta vegetariana se basa principalmente en alimentación en base a verduras, frutas, legumbres, granos, semillas y frutos secos. Dentro de la alimentación vegetariana, existen varios patrones o grupos de clasificación:
Para tener cubiertas las necesidades nutricionales, es necesario incorporar una amplia variedad de alimentos, poniendo especial atención en los aportes de proteínas, algunos minerales como hierro, calcio, zinc, yodo, algunas vitaminas como B12 y D y ácido graso Omega 3.
Tanto internet como las redes sociales en general entregan una gran variedad de información respecto al tema, muchas veces escrita por personas que no tienen conocimientos en este tema. Aquí radica la importancia de solicitar asesoría de un/una profesional preparado/a en nutrición vegetariana/vegana.